Un error muy común a la hora de comenzar un nuevo proyecto profesional es pensar que la marca es lo mismo que el nombre comercial o que la denominación social. Sin embargo, son tres elementos diferentes que conviene entender a la hora de realizar la constitución de la nueva empresa.
¿Qué es la denominación social?
La denominación social (también llamada razón social) es lo que identifica a una persona jurídica. Y, como persona jurídica con sus derechos y obligaciones, tiene su CIF que no es más que el “DNI de las empresas”. Esta identificación fiscal es la que utilizaremos a la hora de realizar cualquier burocracia administrativa o legal. Por ejemplo, para emitir facturas.
Es obligatorio inscribir la empresa con una razón social, ya que será eso lo que le dé la categoría de forma jurídica. Sin razón social no podrá iniciar sus actividades.
Entonces, ¿qué diferencias hay entre la razón social y el nombre comercial?
El nombre comercial es el que queremos que conozcan nuestros clientes y el público en general, mientras que la razón o denominación social se utiliza únicamente en los documentos legales. Normalmente la razón social es descriptiva y el nombre comercial tiende a ser algo más atractivo y memorizable.
Por ejemplo, podemos tener una razón social que se llame “Perico Perez Empresa de Imprentas & Asociados S.L.” y que el nombre comercial sea “Perico Imprime” que resulta más sencillo de recordar para el cliente y es más corto para utilizar en materiales corporativos.
Cuando se registra un nombre comercial, se ostenta el derecho de utilizarlo en exclusiva para identificar a una empresa en concreto. Por ello, se recomienda registrarlo antes de constituir la empresa formalmente.
Un nombre comercial no representa un producto o servicio, sino que identifica las actividades de una empresa.
¿Qué es una marca?
Una sola empresa puede registrar varias marcas. Por ejemplo, es relativamente corriente que una empresa registre una por cada producto o servicio, para que sea más fácilmente identificable por el cliente potencial.
La marca, a diferencia del nombre comercial, sí que sirve para diferenciar productos o servicios de una empresa con otra del mercado.
En España, la institución encargada de estos trámites es la Oficina Española de Patentes y Marcas. Si estás pensando en constituir una empresa y necesitas asesoramiento en el registro del logotipo y marca comercial, consulta nuestros servicios y no dudes en contactarnos.
